lunes, 11 de abril de 2022
FRACTURA EN ÁNGULO DERECHO DE LA MANDÍBULA
jueves, 2 de diciembre de 2021
MESIODENS ASOCIADOS CON DENS INVAGINATUS
Paciente femenina referida para estudio mediante tomografía computarizada de haz cónico con la finalidad de localizar los incisivos centrales superiores ausentes en la cavidad bucal. Se evidenció en reconstrucción panorámica (Figura 1) la presencia de dos dientes supernumerarios en línea media del maxilar (Mesiodens), descritos a continuación como S1 y S2. En vistas axiales, sagitales y reconstrucciones en 3D se evidenció lo siguiente (Figuras 2-5):
Figura 1. Reconstrucción panorámica de tomografía computarizada de haz cónico donde se observa la presencia de dos mesiodens y los incisivos centrales superiores incluidos.
S1 se encontraba en posición vertical, en giro y mesioversión. Corona rompía la cresta alveolar, sus caras proximales convergentes hacia el borde incisal, presentando imagen sugestiva de Dens Invaginatus (DI) en su tercio incisal. 1/3 de raíz formada, contorno vestibular en contacto con el cíngulo del diente 11. Saco pericoronario remanente dentro del patrón imagenológico de normalidad.
S2 mostraba una posición vertical, en giroversión. Corona rompía cresta alveolar, caras proximales convergentes hacia el borde incisal. Se observó imagen sugestiva de DI que se extendía hasta el tercio cervical de la corona, 1/3 de raíz formada. El Contorno vestibular del tercio medio y cervical coronal y porción radicular estaba en contacto con la corona del 21. Saco pericoronario remanente dentro del patrón imagenológico de normalidad.
Figura 2. Vistas axiales de tomografía computarizada de haz cónico en las que se observa la invaginación del esmalte en ambos mesiodens (Flechas rojas).
Se observó la unidad dentaria 11 incluida, en giro y mesioversión, con su eje longitudinal horizontalizado, localizándose superior a S1, de manera que el cíngulo estaba en contacto con el contorno cérvico-vestibular del mismo. La porción radicular mostraba curvatura orientada a distal, el contorno mesial del tercio apical en íntima proximidad con el piso de la fosa nasal ipsilateral. La tabla ósea vestibular se encontraba expandida y adelgazada, no siendo evidente en el tercio incisal de la corona. El saco pericoronario dentro del patrón imagenológico de normalidad.
El diente 21 estaba incluido y en giroversión, con su eje longitudinal horizontalizado. Corona superior y en contacto con el contorno vestibular de S2. Porción radicular presentaba curvatura orientada a distal, contorno mesial del tercio apical en contacto con el piso de la fosa nasal ipsilateral. Tabla ósea vestibular expandida y adelgazada, saco pericoronario de aspecto hiperplásico.
Figura 5. Reconstrucciones 3D de tomografía computarizada de haz cónico, en vistas laterales donde se evidencia en (a), la discreta invaginación del esmalte en el mesiodens del lado derecho, mientras que en el del lado izquierdo (b) se extiende hacia el tercio cervical de la raíz.
sábado, 16 de octubre de 2021
QUISTE RADICULAR ASOCIADO A MOLAR INFERIOR
Paciente masculino de 54 años referido para evaluación de lesión radiolúcida apical a la unidad dentaria 46, observada en radiografía periapical previa, mediante tomografía computarizada de haz cónico. A la asociación de reconstrucciones multiplanares y en 3D, se evidenció imagen hipodensa asociada al ápice de la raíz mesial, unilocular, bordes definidos, corticalizados, que se extiende basalmente y en sentido mesio-distal, en contacto con el techo del canal mandibular (Figura 1).
Figura 1. Reconstrucción panorámica de tomografía computarizada de haz cónico mostrando imagen hipodensa, bordes definidos y corticalizados, asociada al ápice de la raíz mesial del diente 46, sugestiva de Quiste Radicular.
Comentarios
Un quiste es una estructura en forma de saco de tamaño variable, dentro de un tejido, que ocurre en cualquier parte del cuerpo, su contenido puede ser hemático, seroso, semisólido o gaseoso, pero no está normalmente llena de pus, a menos que esté infectada. Los quistes constituyen el 17% de todos los especímenes tisulares sometidos a biopsias bucales (1). El QR es un tipo de quiste inflamatorio de los maxilares de origen odontogénico, es formado por la estimulación y proliferación de los restos epiteliales de Malassez en el ligamento periodontal, después de un trauma dental o caries (1,2). El quiste generalmente se localiza apical al diente afectado o lateralmente cuando se asocia a un canal accesorio o secundario (2).
El QR es el tipo de lesión más frecuente entre los quistes odontogénicos, representando un 52,3 a 70,7% de los mismos, seguido por el quiste dentígero (16,6 a 21,3%) y el queratoquiste odontogénico (5,4 a 17,4%); afecta principalmente al sexo masculino, entre la tercera y quinta década de la vida y usualmente se presenta en la zona anterior de la maxila (1)
El QR es asintomático y el paciente solo lo percibe cuando el incremento de volumen en la zona es clínicamente obvio (2) o bien, son descubiertos cuando se obtienen radiografías intrabucales de dientes con pulpas no vitales; con el tiempo el quiste puede regredir, permanecer estático o aumentar de tamaño (1). El tamaño promedio de un QR se encuentra entre 0,5 a 1,5 mm; los quistes más extensos pueden alcanzar 5 a 10 cm (3,4). Radiográficamente, el QR se presenta como una imagen radiolúcida unilocular, redondeada, de bordes definidos y corticalizados asociada al ápice de un diente con caries extensas, restauraciones defectuosas con fracturas que comprometen la pulpa dental (1-4).
La opción terapéutica suele estar determinada por múltiples factores como la extensión de la lesión, sus características clínicas, la relación con las estructuras anatómicas vecinas y las preferencias del paciente. La mayoría de los quistes radiculares son abordados mediante tratamiento endodóntico, sin embargo, la marsupialización, descompresión y enucleación quirúrgica pueden ser requeridos cuando el quiste es extenso (2,3). Radiografías seriadas son útiles en la valoración de la lesión, la biopsia y el examen histopatológico son los procedimientos estándares para diferenciar un QR de otras patologías periapicales (2).
Referencias
(1) Nik Abdul Ghani NR, Abdul Hamid NF, Karobair MI. Tunnel’ radicular cyst and its management with root canal treatment and periapical surgery: A case report. Clin Case Rep. 2020;8:1387–91.
(2) Narula H, Ahuja B, Yeluri R, Baliga S, Munshi AK. Conservative non-surgical management of an infected radicular cyst. Contemp Clin Dent 2011;2:368-71.
(3) Tootla S, Premviyasa V, Yengopal V, Howes D, Morar N. Radicular cyst: Atypical presentation and therapeutic dilema. SADJ 2017; 72(8):379-82.
(4) Kolari V, Rao HT, Thomas T. Maxillary and mandibular unusually large radicular cyst: A rare case report. Natl J Maxillofac Surg 2019;10:270‐3.
sábado, 7 de agosto de 2021
DENS INVAGINATUS EN CANINO SUPERIOR
Paciente masculino con indicación de estudio mediante tomografía de haz cónico (TCHC) por presentar dolor en la unidad dentaria 23 y aumento de volumen en la zona. En la radiografía panorámica previa, se observó la anomalía de forma en la porción radicular. En vistas trasaxiales (Figura 1) y coronales (Figura 2) se pudo constatar la invaginación del esmalte, que se extendía desde la cara palatina de la corona hacia el tercio medio radicular y se orienta a vestibular causando una aparente bifurcación del conducto radicular y compresión de la cámara pulpar.
Figura 2. Vistas coronales de tomografía computariza de haz cónico, donde se evidencia en el diente 23, zona hipodensa central con aparente bifurcación del canal radicular, ápice en formación e imagen hipodensa difusa asociada al mismo, sugestiva de proceso osteolítico.
Figura 3. Reconstrucciones de tomografía computariza de haz cónico del maxilar, donde se evidencia en vista lateral (A) y (B) Vistal infero-superior la presencia de Dens Invaginatus en el dente 23.
El DI también es conocido como dens in dente, es una anomalía dentaria de forma que se presenta por la invaginación del órgano del esmalte en la papila dental antes que ocurra la mineralización (1), comenzando en la corona y con frecuencia extendiéndose hasta la raíz (2). Se ha reportado una prevalencia entre el 0,04-10%, con mayor frecuencia en incisivos laterales superiores, seguido de incisivos centrales, premolares, caninos y molares, en mayor porcentaje en el maxilar que en la mandíbula y en dentición permanente, con cierta predilección por el sexo femenino (1,2).
La etiología del DI es idiopática; sin embargo, ha sido asociado al aumento de presión externa localizada, retraso en el crecimiento focal, traumatismos, proliferación rápida y agresiva del epitelio interno del órgano del esmalte, procesos infecciosos, factores genéticos y nutricionales (1,2). Se ha reportado su asociación a condiciones tales como: micro y macrodoncia, geminación, fusión, dientes supernumerarios, dentinogénesis imperfecta, odontomas, agenesias coronales, dientes en pala, micro-rizi, múltiples canales radiculares, síndromes de suturas craneales, ameloblastomas y fracturas coronarias. Éstas se presentan generalmente de manera combinada en pacientes con alteaciones cromosómicas. El DI no tratado puede conducir a la formación de abscesos, retención y/o desplazamiento de piezas vecinas, quistes y reabsorción interna (2).
Los dientes afectados pueden presentar clínicamente un diámetro mesiodistal o vestíbulolingual aumentado, muesca asociada a una ranura lingual, cíngulo bífido, forma de barril, forma cónica o en clavija y la presencia de un cíngulo palatino exagerado o un talón cuspídeo (2). Oehlers clasificó el DI según el nivel de la estructura involucrada en tres tipos: tipo I se encuentra en la corona clínica sin extenderse más allá de la unión cemento-esmalte, el tipo II invade la raíz pero permanece incluido en un saco ciego; el tipo IIIa además de invadir la raíz logra una comunicación con el ligamento periodontal, y el tipo IIIb penetra la raíz hasta formar un segundo foramen apical (3).
Radiográficamente se observa la invaginación del esmalte, por lo que es importante el uso de TCHC debido a que facilita la detección de la alteración anatómica del diente y la clasificación del tipo de invaginación, con lo que se podrá determinar el mejor plan de tratamiento a seguir y el pronóstico de la terapéutica endodóntica (2,4).
El tratamiento de estos dientes varía según el diagnóstico clínico y radiográfico; si el DI se identifica oportunamente, el tratamiento podrá ser preventivo, endodóncico, y en circunstancias más complejas, el tratamiento es quirúrgico o como última alternativa, la extracción dental (1)
REFERENCIAS
(1) López R, Campos P, Dávila G, Camacho A, Tenorio F. Dens invaginatus: reporte de un caso clínico. Rev Odontolo Mex 2018;22(3):165-9.
(2) Kusch-Noelke, Zapata-Betancour D, Ruiz-García de Chacón V. Dens invaginatus: revisión de literatura y reporte de 4 casos. Rev OACTIVA UC 2018;3(3):33-6.
(3) Oehlers FA. Dens invaginatus I: variations of the invagination process and associated anterior crown forms. Oral Surg Oral Med Oral Pathol. 1957; 10 (11): 1204-18.
(4) Pérez-Alfayate R, Mercadé M, Vera J. Relationship between internal root resorption and dens in dente. J Clin Exp Dent. 2020;12(8):e800-4.